martes, 15 de diciembre de 2009

La imagen de la muerte

Es en un reportaje del 23 de octubre de 2009 del diario digital elmundo.es, donde se pueden encontrar las siguientes fotos que resultan interesantes de analizar. Todas pertenecen a un reportaje titulado “La violencia cruda de las favelas” con motivo de la muerte de seis nuevas víctimas por la encarnizada guerra que se vive en esa zona marginal de Río.


En esta primera foto se puede observar en un primer plano el pie de lo que se imagina que es un cadáver. En segundo plano aparece todo el vecindario tras un cordón policial. Toda la fotografía está cargada de significado. Esta imagen representa claramente la idea de que no hace falta ser agresivamente explícito para conseguir transmitir la realidad de lo sucedido y a la vez evocar en el espectador un sentimiento sobrecogedor ante la muerte de una persona. No nos hace falta ver la cara de ese cadáver. No queremos verla. Nos basta y entendemos perfectamente la situación de las favelas con una imagen como esta, que es elegante a la hora de mostrar el horror.
Además, nos da mucha más información, ya que con ella, podemos ver cómo reacciona la población con esta situación que les ha tocado vivir. En ellos se muestra una cara serena, de resignación, habituados a vivir en ese infierno. Hasta niños en primera fila mirando sin miedo directamente al cadáver. Es increíble cómo han interiorizado como algo normal estos hechos tan impactantes para nosotros como es el ver una persona fallecida, y más aún, por una muerte violenta. Sinceramente yo no quiero perder esa sensibilidad y aprensión a imágenes de ese tipo, sentiría que no sigo siendo humana.


En contraposición a todo lo dicho anteriormente, estaría esta otra imagen, hecha por el mismo fotógrafo y aparecida en el mismo reportaje del mundo.es. Aparecen tres elementos triangulados que son los más importantes de la imagen. Como protagonistas estarían los cadáveres situados en la parte central, pero quedan un poco desplazados a la izquierda por otro personaje que entra en acción. Este es, el hombre entrado en carnes que con un aspecto de turista está haciendo fotos al esperpento que tiene ante sí. Da miedo pensar que no sea un policía, pero también da miedo pensar que sí lo es. En primera fila y un poco desenfocado por su papel secundario, aparece la cara de un niño que está a unos pocos metros del horror como si nada, ya que debe ser un espectáculo digno de ver, que de vez en cuando le saca de su monotonía del día a día.
Sí que es verdad, que con sólo la imagen del pie no reconstruimos en nuestra cabeza lo que exactamente sucedía en esa calle, ni cómo fueron encontrados los cadáveres. Así pues, nos faltarían informaciones tan importantes como son el dónde y el cómo. Pero todo esto estaría solucionado con la foto que aparece a continuación.


Esta sería otra forma elegante de mostrar toda la información de ese hecho. La primera y última foto no dejarían ninguna pregunta sin contestar, contextualizarían muy bien el reportaje y sobre todo y lo que es más importante, no dañarían la sensibilidad de nadie sin sacrificar ningún elemento informativo. Se demuestra así, que si se quiere se puede retratar la más dura realidad sin imágenes explicitas de mal gusto.



http://www.elmundo.es/albumes/2009/10/23/brasil_violencia/index.html

viernes, 11 de diciembre de 2009

El “REY” del progreso

Esta imagen es la principal de la portada del diario ABC, publicado el 9 de diciembre de 2009. Sin embargo, si nos adentramos en las páginas interiores, no volvemos a verla. La foto que acompaña a la “verdadera” información en el interior del periódico, no es la misma imagen de la portada. A simple vista, parece que la primera foto es una ampliación de la segunda pero, en realidad, son fotos diferentes. Si las comparamos con atención, observamos que las manos de Obama, en ambas imágenes, están levantadas. Pero, ¿es la misma mano? En la principal tiene la mano derecha levantada y en la del interior, es la izquierda la que tiene arriba. Por tanto, nos centraremos en la principal, que por algo nos la ponen “ampliada”.


Al tratarse de una imagen de portada, además de ser de gran tamaño, va acompañada de una serie de titulos en forma de pie de foto, titular y subtítulo. En todos ellos, se explica algo, lo más importante, referente a la noticia.

Llamativamente, el pie de foto no sitúa en ningún lugar la imagen. Más bien, se aprovecha ese espacio para vendernos la información. En lugar de indicar dónde está Obama, nos informa de que “enunció ayer su receta contra el paro, …” .
A continuación, el titular; que de forma indirecta hace comparación con nuestro Presidente. (La noticia es que a diferencia de nuestro Gobierno que no apoya la bajada de impuestos solicitada por algunos ciudadanos, el Presidente de los EEUU, sí lo hará.)
Y finalmente, se guarda un espacio para el subtítulo. Una breve frase que describe el "plato fuerte" de la noticia: "Anuncia más ayudas a pymes y mayor inversión en infraestructuras.

Esta foto está tomada en Washington, concretamente en Brookings Institution. Una institución estadounidense creada con el fin de "ayudar al desarrollo de políticas públicas sólidas y promover la comprensión del público de cuestiones de importancia nacional." El juego está en el nombre de la institución, que conlleva integrada la palabra "rey" en inglés (king). Aunque lo parezca, no se trata de un montaje, sino simplemente de una buena perspectiva de la imagen. Precisamente, el periodista ha querido resaltar el caracter carismático de Obama, haciendo un juego de palabras. En ningún momento se expresa con palabras el significado de que sobre la cabeza de Obama aparezca la palabra, en mayúsculas, pero sin embargo, esto conlleva un significado connotativo. Todo el mundo sabe que Obama es el Presidente de la primera potencia mundial, y que él, está haciendo que sea el primer país que salga de la crisis. Quizá por eso, se merezca, según esta imagen, el calificativo de rey.

Por otra parte, observamos varios elementos formales. En cuanto al color del fondo, se juega con dos tonos de azul que ocupan mitad y mitad, de arriba a abajo. Por ello, podríamos hablar de dos espacios simétricos que ofrecen dos imágenes diferentes. En la parte de arriba el peso de la imagen está en la palabra KING, ya que es lo único que aparecería en la imagen si ésta la dividiéramos en dos. Y en la parte de abajo, el peso de la imagen se centraría en Barack Obama, ya que estaría en lal mitad de la imagen. Sin embargo, si tomamos la imagen como una sola, no sabría decir si el peso estaría en la palabra KING o en la imagen de Obama ya que el conjunto de ambas es lo que describe la noticia.

miércoles, 9 de diciembre de 2009

Cuando no sea noticia...



Esta es la fotografía que acompaña a la noticia(1) sobre la celebración en el Parlamento Vasco del nacimiento de Louis Braille. En un sentido estrictamente formal, o dennotativo, vemos una imagen cuyo elemento con mayor peso visual son las manos de esa mujer invidente. Unas manos que están en la parte inferior ligeramente hacia la izquierda, y que reciben la luz, no tanto porque haya una especie de foco, sino por el contraste de colores: la mujer vestida de negro, el fondo oscuro también y, en contraste, esas manos clarísimas sobre un folio y una mesa luminosas y de tonos claros. Esta fotografía se divide en dos bloques, a un lado el atril con las manos (o mejor dicho, las manos con el atril), al otro lado, el cuerpo de la mujer. De fondo hay una "masa", que si nos fijamos son dos figuras masculinas sin cabeza, para que el lector de la imagen no pierda el tiempo en ellos, no son trascendentes ni reseñables.


La asimetría de la imagen no hace sino aumentar el peso visual del elemento principal, esas manos que acaparan toda la atención. Y que, ya desde una perspectiva más connotativa, nos transmite luminosidad, un concepto apropiado para la imagen, tomada en un homenaje a Braille, inventor del sistema de escritura y lectura para personas invidentes. La noticia (1),, que lleva por titular: "El pleno del Parlamento vasco recuerda a Louis Braille", y por pie de foto: "Una mujer invidente da lectura del orden del día del pleno del Parlamento vasco", va acompañada de una fotografía que dice mucho sobre la misma.


La claridad que ilumina las manos de esa mujer demuestran que los invidentes y otros discapacitados han llegado lejos en su lucha por la adaptación, pero no han terminado, quizás lo hagan el día en el que una mujer invidente leyendo el orden del día en un parlamento no sea una noticia.



(1) El Pais, edición digital, Pais Vasco, 9/12/2009

Buena fotografía, Mal planteamiento


Esta es la imagen de la última campaña de loewe. Una fotografía que, estéticamente es correcta, analizada en sentido estricto, como una imagen, de manera denotativa, es una buena fotografía (para no serlo, con lo que se deben de gastar en publicidad).


Observamos que la fuerza de la imagen, el elemento de mayor peso es la cara de la chica, concretamente su mirada y su boca, que forman el triángulo principal de dicha imagen. Y a ello contribuye la luz que hay en la fotografía, que cae en picado desde arriba, pero de forma algo difuminada, iluminando la parte izquierda de la imagen (lado derecho de la modelo).

Se trata de una imagen asimétrica, poco o nada geométrica, de líneas curvas y sinuosas, pero estudiadas. Son la boca y los ojos los elementos de mayor peso porque contrastan en color con el resto de la fotografía, que mantiene unos tonos claros y dorados (incluso el vestido, que solo intuímos, es del mismo tono). Es el objetivo, que toda la imagen mantenga un orden estético para que el elemento principal realmente llame la atención. Además los tonos elegidos evocan elegancia, sencillez, frescura, adjetivos que se corresponden con la imagen que loewe quiere dar de este perfume, más desenfadado.


Pero, y ya en un plano más connotativo, el triángulo que lleva el peso de la imagen lo lleva, porque el objetivo es llamar la atención sobre la postura de la modelo, sobre la acción que está realizando, sobre la pose que mantiene. Todo ello, unido a los tonos utilizados, y la luz (tanto la cantidad de la misma, como la forma en la que está proyectada -tipo foco difuminado-) ofrecen la imagen de una mujer sensual, atractiva, algo animal incluso, que recuerda a un felino por su forma de lamerse, transmite una sensación de perfección y locura (como el nombre de la fragancia en cuestión).


Aunque, efectivamente la fotografía, en sus elementos formales es impecable, no así en los valores que transmite. La manida imagen de sensualidad como única característica destacable de una mujer, debería ya quedar para la publicidad pasada de moda. Se trata aquí, en este anuncio de loewe, a la mujer, como puro objeto sexual que no tiene nada más que ofrecer que su cuerpo. Y claro, un cuerpo bello, joven, delgado..., en fin lo que caracteriza a una mujer de anuncio, por desgracia para las tantas féminas que intentan imitar a estas imposibles bellezas. Imposibles porque todas están harto retocadas, porque no existe, no ya la mujer, sino la persona perfecta. Una última apreciación, es curioso que la mayoría de los anuncios sobre productos destinados al sexo femenino, especialmente perfumes, tengan como protagonistas a mujeres, perfectas sí, pero también casi desnudas, ¿es éste un reclamo para que los hombres heterosexuales compren dicho producto a sus parejas? Porque dudo mucho que los publicistas piensen que ese pequeño y significativo detalle atrae a las consumidoras.